En caso de que cambies de opinión y no quieras comprar la propiedad que reservaste, existen algunas sanciones monetarias que deberás pagar. Es importante que en el contrato firmado de la reserva se especifiquen todas las sanciones en caso de que se permita una salida del compromiso, se debe mencionar a qué costo o bajo qué penalidad se llevaría a cabo. Algunos ejemplos de sanciones puedes ser:
- Perder un porcentaje de la reserva.
- Perder un porcentaje del valor total del departamento.
- Otra sanción acordada con la inmobiliaria.
Además de poder negociar con la inmobiliaria para minimizar las pérdidas, se puede pactar situaciones en que no exista esta sanción monetaria, como por ejemplo, en caso de que el comprador pierda su fuente de ingresos y lo compruebe con una carta jurada bajo notario y un finiquito salarial.
La reserva de una propiedad no te obliga a hacer la compra final de esta, sin embargo, es muy importante que estés muy seguro de tu decisión al momento de reservar porque podrías perder este monto que no necesariamente será bajo y pasar un mal momento.
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